Conoce, pues, que Jehová, tu Dios, es Dios,
Dios fiel, que guarda el pacto y la misericordia
a los que le aman y guardan sus mandamientos,
hasta por mil generaciones.
Deuteronomio 7,9
San Pablo escribe:
Como colaboradores suyos,
os exhortamos también a que
no recibáis en vano la gracia de Dios.